¿Qué puedo decir? ¿Qué palabras emplear? ¿Cómo describirlo?
Naturalmente, es imposible.
No se puede expresar qué se siente al pasar setenta días en nomadismo puro solo contigo mismo. No hay modo alguno de componer un relato fidedigno y genuino de todo cuanto ha acontecido, casi un universo entero de sensaciones y sentimientos.
Y, pese a todo, voy a intentarlo. No sé hacer otra cosa. Saldrá bien o mal, y poco importará.
“La Ruta Errante” es su nombre. Ha nacido hace unos minutos; dadle tiempo para que crezca y tome forma. Quizá haya algo en él que merezca ser conservado, o compartido. Ése es, desde luego, el objetivo; si no, al menos habrá servido para rememorar el gusto de unos días de inenarrable gozo y euforia vital.
Allá vamos…
La Ruta Errante
2 comentarios:
Bienvenido en tu retorno al mundo "normal" (todo lo normal que pueda ser, más que nada por oposición a esos dos meses de ruta errante). Espero poder capturar algo de esas sensaciones de tu viaje, a través de tus historias y experiencias.
Un saludo.
Gracias, compañero, por seguir ahí.
Y la verdad es que me está costando volver a esa "vida normal", como bien dices, despues de vivir 70 días en 13 metros cuadrados e ir de paraje en paraje... Ay!, cuánto lo hecho de menos, y apenas llevo cinco días aquí... :)
Saludos, y gracias de nuevo.
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