A veces huímos, nos alejamos todo lo que podemos, tratamos de llegar cuanto más lejos mejor; y, sin embargo, al otro lado de casa a veces (estoy tentado de escribir "siempre", porque así lo siento) podemos hallar todo lo que necesitamos. Paz, silencio, amistad, naturaleza, belleza, y amor.
Eso no obsta a realizar algunas grandes rutas, viajes titánicos en tiempo y espacio (pretendo cubrir los dos próximos meses a lomos de mi casa rodante y a mil kilómetros de esta tierra costera... veremos cómo acaba esa locura...), pero sepamos, tengamos consciencia de ello: junto al hoyo en donde metemos la cabeza día a día, en donde residimos de ordinario (y de donde, tan a menudo, queremos tontamente salir) ,es ahí en donde podemos satisfacer casi todas nuestras inquietudes y necesidades.
Y si, además, disponemos de un medio de disfrutar al máximo de los parajes que hollamos, un medio que permite sentir, otear, paladear, meditar, dormir y soñar en ellos, un medio que te protege, que es tu santuario móvil, entonces el placer es gloria, y la felicidad, puro éxtasis.
¡Salut, y buenos viajes para todos!

Gaianes, febrero de 2011

Castell de Perpuxent, L´Orxa, febrero de 2011

Embalse de Beniarrès, febrero de 2011

Mirador de la Vall, Vall de Gallinera, febrero de 2011

Beniarbeig, febrero de 2011

Cementerio de Pego, enero de 2011

Castell de Forna, enero de 2011

Platja de Piles, enero de 2011

Alqueria del Duc, enero de 2011

Ermita de la Xara, enero de 2011

La Drova, solsticio de invierno 2010
Platja de Piles, diciembre de 2010
Barx, diciembre de 2010

Gaianes, noviembre de 2010
(Imagen: El Hermitaño)