26 de abril de 2015

Benditas


Es lindo regresar con ellas del huerto, en una gran bolsa; sentarte, pelarlas mientras escuchas un poco de música y, después, con algo de cebolla y patatas y el sencillo arroz, preparar una "cassoleta d´arròs al forn" puramente vegano, sabiendo que nadie tuvo que matar a nadie para ello...

Y, además, es más lindo aún saber que las habas, como buenas leguminosas, pillan el nitrógeno del aire y lo fijan en la tierra, por lo que la enriquecen por ellas mismas.

Por tanto, más allá de su valor nutritivo y su sabor, son útiles y colaboran en la riqueza de la tierra. ¿Qué más se les puede pedir?

Las adoro!!

(Imagen: El Hermitaño)