31 de julio de 2005

Entre gas, polvo y astros jóvenes



NGC 2244 resplandece en lo alto en los cielos invernales (que ahora tanto anhelamos con en calor espeso y atontante que padecemos) junto a Orión, una región de nuestra galaxia la Vía Láctea muy rica en nebulosas y racimos de estrellas recién formadas.

Ésta en concreto brilla con tal intensidad precisamente gracias a las estrellas que tiene a su alrededor, que la iluminan con la energía procedente de su interior. Las nebulosas como NGC 2244 son las zonas de creación de nuevas estrellas; aunque puedan nacer en grandes grupos, los astros pronto inician sus propios caminos por el Cosmos, cada una siguiendo su viaje prefijado únicamente por la fuerza de gravedad. En cierta manera estas nebulosas son como grandes madronas que tuvieran decenas de hijos; todos ellos serían criados y cuidados por ella, proporcionándoles la materia necesaria para convertirse en seres desarrollados que, con el tiempo, saldrían al exterior y vivirían una existencia independiente.

Las extrañas formas oscuras que parecen manchas alargadas de tinta son en realidad nubes de polvo que enmascaran la luz que tienen detrás; en ocasiones, esas nubes oscuras crean estrellas en su interior, protegiéndolas de fuertes ventiscas estelares que pueden desprender su hipotética concha de material residual, a partir de la cual quizá se formen planetas en un futuro no muy lejano.

De modo que en esta fotografía tenemos todos los ingredientes para la elaboración de nuevas estrellas: energía, gas y polvo. Con ello, el Universo transforma la simple materia en luz y, quizá, vida e inteligencia. Si ha pasado en nuestro pequeño rincón planetario, ¿por qué no puede suceder allí?

6 comentarios:

chusbg dijo...

Pienso que sí, que en alguna parte tiene que haber formas de vida.
Cómo es que te llama tanto el cosmos, que es lo que te atrae de él. Ya sé que puede ser una pregunta tonta pues la pregunta podría ser, que es lo que no te atrae, pero me gustaría oir tu versión, todo sin agobios y cuando puedas contestar pues ya sé que el tiempo se tiene cuando se tiene.
Un saludo

arbiera dijo...

Hermitaño, ¿Crees de verdad en la existencia de vida inteligente... en nuestro planeta?
Jeje, era broma. Es por darte caña.
un saludo

elHermitaño dijo...

Amigo chusbg, la respuesta a tu pregunta (que de tonta no tiene nada...) es muy sencilla: no tengo la más remota idea.

Todo nació porque le pedí a mi abuelo que me trajera un libro sobre "esas cosas que pueden verse en el cielo". Por entonces tenía 8 años y los OVNI's eran mi pasión. Sin embargo, el pobre hombre entendió mal (es decir, bien...) y me regaló una obra de Astronomía.

Al principio me irritó porque no era lo que yo quería, de modo que no lo usé para nada. Más tarde, ocasionalmente, cuando los ovni's no aparecían por ningún lado (o me los tenía que inventar) empecé a ojear el libro; con el tiempo, aprendí las constelaciones, la ubicar galaxias, cúmulos y demás, y gracias a unos prismáticos de mi padre (con 30 años a las espaldas) pude observar realmente el Cosmos. En cuanto comprendí su inmensidad y su extremada vejez, el Universo me atrapó para siempre.

Realmente no me lo explico; yo no hice nada, no fue alguien mayor quien me lo enseñó, nadie me instruyó sobre el Cosmos, jamás tuve a nadie que me instigara a observarlo o maravillarme por él y, sin embargo, hoy en día me es imposible vivir si no leo cada día algo sobre Astronomía o echo una ojeada al cielo.

Es cierto que todo este rollo no responde realmente a tu pregunta, pero no puedo explicarlo mejor. Supongo que la Providencia quiso que en lugar de ovnis me interesara por el Cosmos, quizá si hubiese visto unos cuantos ovnis buenos la Astronomía jamás hubiese aparecido en mi vida y ahora en lugar del hermitaño cósmico sería el hermitaño esotérico o ufológico (que mal suena, ¿verdad).

No sé si tendrás suficiente con esta respuesta, amigo chusbg, pero ya digo que no sé cuál es la razón; ya me gustaría a mí conocerla... .

Muchas gracias por tu interés, y estoy contigo con que deben haber muchas formas de vida (inteligentes o no) en otras partes del Universo. Es de sentido común... pero mejor intentaré explicarlo en otra ocasión porque este comentario ya es muuy largo.:)

Gracias, saludos y abrazos.

elHermitaño dijo...

Arbiera... muchas veces... pero muchas muchas veces lo dudo. Es gente como vosotros quiene me hace reflexionar y aceptar que, aunque sea en poca cantidad, la vida inteligente realmente existe en la Tierra.

No creáis que digo esto por adular (bueno, quizá sí, a fin de cuentas sois visitantes habituales y os tengo que conservar;)), es sólo una evidencia irrefutable.

Saludos.

chusbg dijo...

Pues si, contestas muy bien a mi pregunta, y también debo decir una vez más, los abuelos...a veces que listos son y aunque no sean listos está el antiguo proverbio de que " más sabe el zorro por viejo que por zorro", enhorabuena por un abuelo con visión.
Saludos

Roberto Iza Valdés dijo...
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